La pintura para albercas es un recubrimiento desarrollado a partir de hule clorado, plastificantes y pigmentos coloridos de la más alta calidad.
Forma una película de alta impermeabilidad, lo que lo hace resistente a la humedad y a los productos químicos que se mezclan con el agua de la alberca.
Resiste mejor que ninguna otra el crecimiento de algas, hongos y moho. Se puede lavar repetidas veces sin que pierda su color y brillo.